La hija de Equal Stripes se impuso de punta a punta, con el detalle de haber tenido que esquivar hasta perros en la recta final
LA PLATA.- Hace ya muchos años que el Bosque es un dibujito animado; un reino donde pasan cosas increíbles y únicas, lamentablemente, malas o tristes. Este jueves pudo haber habido una tragedia en el Clásico Lucio Taborda (G3-1400 m, arena normal), pero el destino fue generoso.
¿En qué hipódromo del mundo 4 perros pueden cruzar la pista en la recta final justo cuando los participantes encaran ese tramo? No hay muchos, al menos que puedan considerarse de primera línea. Uno de ellos es La Plata.
Tan rápido corrió Byron Star en la central que hasta pudo esquivar a los simpáticos animalitos que, por centímetros, no hicieron caer a la hija de Equal Stripes de La Frontera que terminó convirtiéndose en la gran figura de la jornada con su victoria.
Hoy anécdota, el detalle no hace más que hablar de la desidia absoluta que existe en el escenario que regentea patéticamente la Lotería de la provincia de Buenos Aires, convertida hace tiempo en uno de los grandes entorpecedores en el camino de la hípica argentina, entre otros, por este motivo.
Volviendo a Byron Star, Francisco Leandro encontró la forma de graduar sus energías sin quitarle ritmo, y la potranca preparada por Nicolás Martín Ferro respondió de la mejor manera, sin dejarse alcanzar nunca y rematando con firmeza hasta arribar a la meta con 5 cuerpos de ventaja sobre Candy Fy (Fortify), con 3 más hasta Total Triomphe (Cima de Triomphe), la tercera.
El tiempo empleado por Byron Star fue de 1m24s90/100, tras parciales bien firmes de 23s66/100, 46s50/100 y 1m12s76/100, con la arena bastante suelta ante la falta de lluvias.
La gran decepción corrió por cuenta de Bichita de Luz (Fragotero), la favorita, que no tuvo el fuego de su victoria previa en el Clásico Luis Monteverde (L), se fue hacia afuera al pisar la recta y terminó cruzando la meta en la última posición a 29 cuerpos, en una actuación totalmente anormal en comparación a lo bueno que venía mostrando.
Criada por el Haras Abolengo, y en Byron Bay (Exchnge Rate), en una familia importada desde los Estados Unidos por el Haras Santa Inés, la zaina llegó a su cuarta y mejor victoria al cabo de 10 salidas, mostrando síntomas interesantes de madurez y en la que fue su segunda actuación allí, pues de potranca había finalizado cuarta de Mi Chica Ideal (Daddy Long Legs) en el Clásico Miguel Luis Morales (G2).
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