El potrillo Dark Saffron sorprendió a todos en la Dubai Golden Shaheen

Mientras Tuz fue tercero con muchos tropiezos y Straight No Chaser defraudó por completo, el hijo de Flameaway coronó el gran Carnaval de Connor Beasley

Una imagen que vale más que 1000 palabras / DRC

Con una conducción magistral de Connor Beasley, el potrillo local Dark Saffron desató una de las sorpresas más resonantes de la jornada al imponerse en el Dubai Golden Shaheen (G1), dejando atrás a consagrados velocistas internacionales.

La presencia de dos ejemplares de tres años en la carrera ya era un tema de conversación en la previa: desde 2006 que no se daba una situación similar. Hasta el sábado, sólo cinco potrillos habían competido en el Golden Shaheen y apenas dos de ellos eran nacidos en el hemisferio norte: My Catch (12º en 2014) y Dios Corrida (11º en 2017).

De los dos participantes jóvenes, era el japonés American Stage quien llegaba con mayores credenciales, aunque ninguno parecía en condiciones de desafiar ni al campeón defensor Tuz ni al destacado velocista estadounidense Straight No Chaser.

Pero todo cambió en la pista. Dark Saffron, entrenado por Ahmad bin Harmash, inquietó a más de uno al mostrarse inquieto en el partidor externo (el 11), segundos antes de la largada. Sin embargo, Beasley logró acomodarle la cabeza justo a tiempo, y el zaino salió disparado con velocidad inicial notable.

Los dos potrillos se adueñaron del trámite en los primeros metros, y rápidamente quedó claro que Straight No Chaser no tendría su día: incómodo con el kickback, nunca encontró su ritmo y quedó fuera de carrera temprano.

El único que lograba seguir el ritmo de los punteros era Tuz, que se ubicó en una posición inmejorable y parecía listo para aprovechar cualquier declive. Pero también empezó a sentir el rigor cerca de los 600 metros y su intento por repetir la hazaña de 2023 se fue diluyendo.

No obstante, Tuz sacó a relucir su garra y buscó resurgir por el riel. Ahí fue donde Beasley mostró todo su oficio, cerrándole inteligentemente los caminos a Tadhg O’Shea en más de una ocasión.

Cerrando fuerte desde el fondo, Nakatomi descontó con ímpetu, Tuz volvió a cargar cuando todo parecía perdido, pero Dark Saffron, con los 3.5 kilos menos respecto a sus rivales, se mantuvo firme y se quedó con todo. Fue la segunda victoria de Beasley en la noche, tras haber ganado también la Kahayla Classic con First Classs.

“Estoy un poco sin palabras”, confesó Beasley tras bajar del ganador. “Este caballo es de esos que no paran de mejorar. Venía corriendo contra buenos caballos en el césped, pero tiene una velocidad natural impresionante. Lo que hizo hoy es increíble”.

“Es un gran alivio, porque es para esto que trabajamos. Tenemos un lote de buenos caballos, pero ganar una carrera así, en una noche así, es simplemente fantástico”.

“Tiene muchísima velocidad natural y, siendo sinceros, probablemente fue una bendición largar abierto. Sólo tenía una opción, y la manera en que lo hizo fue espectacular”.