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Obra Clásica dibujó un triunfo notable de punta a punta en el Juárez Celman

Foto del escritor: Turf DiarioTurf Diario

La reservada del Haras Pozo de Luna saltó desde las condicionales al nivel gradual con el mejor de los resultados


Obra Clásica llegó a los clásicos para hacer ruido / JUAN I. BOZZELLO
Obra Clásica llegó a los clásicos para hacer ruido / JUAN I. BOZZELLO

En una carrera donde los nombres de experiencia eran varios, la victoria quedó para una potranca que llegaba llena de sueños después de una gran victoria condicional. Obra Clásica, de ella se trata, dibujó un valiente triunfo en la milla del Clásico Miguel Angel y Tomás Juárez Celman (G2), que se corrió el domingo en el Hipódromo Argentino de Palermo, sobre su pista de césped llena de matas, pasarelas y manchones.

Con Francisco Leandro en sus riendas, la hija de Daddy Long Legs salió ligero de los partidores, se afirmó por dentro en la delantera y ya no se dejó alcanzar por ninguna de sus rivales, estableciendo un tiempazo de 1m31s72/100, conociéndose solo el parcial para los 400 metros iniciales (improbables 20s30/100...), un dato que no se puede pasar por alto, pues una de las catedrales del turf mundial no puede no medir los parciales de una prueba tan importante, o, directamente, hacerlo de vez en cuando si se corre en su cancha interna.

La favorita Amiguita Gina (Todo Un Amiguito) fue la que más descontó en el derecho, llegando segunda a medio largo de la ganadora, viniendo algo más lejos de lo que acostumbra, con Abogada Brava (Cosmic Trigger) volviendo a caer en el terreno gradual, llegando tercera a 1 1/2 cuerpo. A medio más, Viva Al Sur (South Kissing), que venía entonada desde los handicaps, sumó un valioso cuarto lugar.

Nicolás Martín Ferro prepara a Obra Clásica, reservada del Haras Pozo de Luna y que hasta este domingo contaba con apenas dos festejos condicionales en 7 salidas, pero que ya venía evidenciando un crecimiento pronunciado de un tiempo a esta parte.

La décima segunda cría de Daddy Long Legs en ganar clásicos en el país, Obra Clásica tiene por madre a Ochagavia, ganadora a los 2 años en San Isidro e hija de Orpen (Lure), que en su rol de abuelo materno se quedó con 3 de los 4 clásicos del fin de semana, pues el sábado en San Isidro había brillado a través de Grezzo (Hi Happy) y Verenna (Cosmic Trigger), que se impusieron en el Gran Premio Miguel A. Martínez de Hoz (G1) y en el Clásico Omnium (L), respectivamente.





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