El inolvidable ganador del Gran Premio Carlos Pellegrini (G1) es otro de los reproductores que venden este año sus primeros yearlings
Por Diego H. Mitagstein
Si se habla de caballos con corazón, el nombre de Village King no tarda demasiado en aparecer. Si todavía parece increíble aquella despedida con la gloria máxima de las pistas, cuando 11 de diciembre de 2021 ganó por demolición el Gran Premio Carlos Pellegrini (G1), apenas unas horas después de que su equipo estuviera a punto de borrarlo por una salud que durante mucho tiempo fue su punto débil.
Sin embargo, su coraje y su clase, esos que lo empujaron a convertirse en uno de los indiscutibles grandes ejemplares nacidos en Argentina en los últimos años, lo llevaron a ganarse una ovación, cruzando el disco con 9 cuerpos sobre Miriñaque (Hurricane Cat), otra referencia nuestra de los tiempos cercanos.
El zaino, apaciblemente retirado y cumpliendo funciones en la reproducción en el Haras Chenaut, será otro de los padrillos que verán su debut en los rings de venta durante la actual temporada aquí, rodeado de expectativas elevadas y con una primera camada compuesta por 55 crías.
Criado por el Haras Santa María de Araras, y siempre defendiendo los colores del Stud Haras El Angel de Venecia -el mismo que hoy encabeza el sindicato de su etapa en la cabaña-, Village King cumplió campaña en la Argentina, pero también en los Estados Unidos.
De local, fue Carlos D. Etchechoury el encargado de prepararlo, sin caerse del tercer puesto en sus 12 salidas, e imponiéndose en 9 de ellas. No solo brilló quedándose con aquel Pellegrini inolvidable, sino que entre sus trofeos también se cuentan los de los grandes premios Jockey Club (G1), Martínez de Hoz (G1) y 25 de Mayo (G2), sin olvidar sus victorias en los clásicos Ensayo (G3), Progreso (G3) y Porteño (G3).
Además, llegó tercero en los Pellegrini de 2017 y 2020 y segundo en la Copa de Oro (G1), con su otra derrota ocurrida el día de su debut, en una trayectoria sencillamente formidable.
En el norte, bajo la tutela de Todd Pletcher, Village King le puso categoría a su medios delicados, ganando en la arena de Aqueduct el Red Smith Stakes (L), pero además llegando tercero en el Pan American Stakes (G2), cuarto en el Harlan's Holiday Stakes (L) y quinto en el Mac Diarmida Stakes (G2).
Village King es continuador de la línea paterna de Mr. Prospector (Raise a Native) a través de Kingmambo, que produjo a Campanologist, el padre del crack de El Angel de Venecia. Un trotamundos para Godolphin, dejó apenas 3 generaciones en nuestro país, antes de morir en 2015 cuando regresó a Alemania, donde tenía su base, por un cólico a poco de bajar del avión.
Por lejos Village King fue su mejor cría, aunque también produjo a Tiger Feet, que supo vencer en el Gran Premio General San Martín (G1) de 2018 con los colores de Tramo 20.
La familia materna de Village King es la de Lady Be Good (Better Self), excelente corredora a fines de los 50' y principios de los '60 y que fundó una dinastía de grandes corredores a nivel mundial.
La primera generación de Village King contó con el apoyo de varios criadores importantes, tales los casos de los haras Orilla del Monte, La Nora, El Gusy, el propio Chenaut, El Paraíso y Santa María de Araras.
Entre las yeguas que le fueron presentadas aparecen las clásicas Real Moon (Stay Thirsty), Chorister Rye (Catcher In the Rye), Jaynella (Curlinello), Royal Ballerina (City Banker), Bold Freud (Freud), Che Silvina (Greenspring) y La Fantastique (Le Blues).
Los buenos caballos argentinos siempre respondieron ante una oportunidad razonable en la reproducción, y con la categoría que mostró Village King no hay nada que haga pensar de que no puede seguir esa tradición, ofreciendo a los propietarios una fuente de stamina importante y tan escasa por estos días, pensando en las grandes carreras sobre césped del calendario nacional.
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